Cuando se empieza a sentir las primeras oleadas de la temporada invernal, surgen las compras apresuradas de cualquier artilugio que nos mantenga en calor. Uno de los más buscados son los prácticos y eficientes radiadores eléctricos.

Sin embargo, dada la gran variedad de modelos, marcas y precios el adquirir uno de estos aparatos puede convertirse en una experiencia frustrante. Quédate aquí y entérate todo lo que debes saber para comprar un radiador eléctrico.

Lo primero que debemos conocer es cómo funcionan estos equipos. Apartando la obviedad de que la principal y única fuente de energía de estos emisores de calor es la electricidad, estos equipos se basan en un fenómeno físico. Este principio se le conoce como efecto Joule o calentamiento resistivo.

El efecto Joule proporciona la irradiación de energía que genera el radiador eléctrico. Básicamente al transmitirse corriente eléctrica a través de un conductor se eleva la temperatura del mismo. De esta forma se obtiene aire caliente continuo, esparciendo el calor a través de un ventilador que lo dirige hacia donde se desee.

La aplicación del efecto Joule para propagar calor de uso doméstico no solo es exclusiva de los radiadores eléctricos. Se puede observar en secadores de cabello, tostadores, planchas para ropa, hornillas de cocinas entre otros.

Entre sus principales ventajas es la ausencia de “desechos” como producto de su uso. No resecan el ambiente, son de cero emisiones de gases y producen poco o nulo ruido. Adicionalmente son fáciles de instalar y por lo general se pueden cambiar de ubicación con mucha facilidad.

Claves para escoger al radiador eléctrico ideal

Ahora que ya hemos repasado el funcionamiento del radiador eléctrico, resolvamos la principal interrogante: como elegir el ideal. Lo primero que debes se debe considerar antes de comprar unos de estos maravillosos equipos es el espacio que se desea climatizar.

Las dimensiones del lugar a calentar son fundamentales, dado que ello nos dará una idea de la fuerza del radiador eléctrico que necesitamos adquirir. Por lo general se aplica la siguiente formula: 80W y 100W de potencia por cada m2 del espacio.

El uso de esta fórmula es fundamental, siendo que nos evitara costosas facturas de servicios eléctricos. En algunos casos y dado el tamaños de la estancia que deseamos calentar es muy posible que se deban emplear más de un radiador.

Otro factor a tener en cuenta es que estas estufas eléctricas incluyan un termostato. Este dispositivo abrirá o cerrara la corriente que pasa por el radiador de acuerdo a la temperatura previamente seleccionada. Esto garantizara un ambiente más uniforme y cálido, así como grandes ahorros de energía.

La mayoría de estos aparatos son visibles, razón por la cual el diseño de los mismos es otro elemento que no debe ser pasado por alto. Gracias a las novedosas innovaciones, los contemporáneos radiadores eléctricos pueden convivir de manera armónica con cualquier espacio. El sentido común y la esteticidad deben prevalecer al momento de escoger estos equipos.

Por último, la relación precio-valor en estos equipos siempre estará sujeta a su calidad. Decantarse por radiadores eléctricos de marcas reconocidas, garantizan un óptimo funcionamiento y durabilidad.

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